El CIBER a través del área de Enfermedades Cardiovasculares (CIBERCV) ha obtenido una ayuda de 644.600€ de la convocatoria de Proyectos de Investigación Clínica Independiente (ICI) para desarrollar el proyecto Metoprolol in Acute Respiratory Distress Syndrome (MAIDEN trial). Este proyecto tendrá una duración de cuatro años y estará dirigido por Borja Ibáñez, jefe de grupo del CIBERCV en la Fundación Jiménez Díaz e investigador también del CNIC.
El proyecto MAIDEN va a testar los beneficios del “metoprolol” (un fármaco antiguo ampliamente utilizado para otras indicaciones como hipertensión arterial, arritmias o infarto aguo de miocardio) en pacientes críticos ingresados en una unidad de cuidados intensivos (UCI) por un Síndrome de Distrés Respiratorio Agudo (ARDS).
Los investigadores del consorcio MAIDEN, pertenecientes al área del CIBERCV y también al CIBERES (enfermedades respiratorias) han liderado anteriormente múltiples ensayos clínicos testando el metoprolol en pacientes críticos con ingarto agudo de miocardio (IAM), mostrando su seguridad y grandes beneficios.
"El mecanismo por el cual el metoprolol protege el corazón durante un IAM se ha demostrado secundario a su capacidad de inhibir la inflamación exacerbada mediada por neutrófilos, cuya infiltración pulmonar juega un papel central en la patogénesis y severidad del ARDS" apuntan los investigadores, que ya han demostrado que este efecto es único del metoprolol, y no compartido por otros fármacos de la familia de los beta-bloqueantes." Este efecto único se debe a la interacción espacial del fármaco con el receptor adrenérgico tipo beta 1, que sufre un cambio en su estructura sólo cuando se une a metoprolol" añaden.
Así, el proyecto actual se basa en la hipótesis de que el metoprolol puede tener un papel muy beneficioso en el contexto del ARDS.
"En un ensayo clínico previo en pacientes con ARDS y COVID-19 hemos encontrado que el metoprolol intravenosos es totalmente seguro y muy bien tolerado y que su administración se asoció a una mejor oxigenación de los pacientes, y a una reducción del número de días de intubación y ventilación mecánica invasiva" detallan los responsables del proyecto.
En el proyecto MAIDEN se va a realizar un ensayo clínico grande en pacientes con ARDS de múltiples etiologías (incluyendo a pacientes con COVID-19) para validar los resultados encontrados en este ensayo clínico piloto. "Si nuestra hipótesis se cumple, los protocolos de actuación y las guías de practica clínica deberán incluir la administración de metoprolol intravenoso, y esto resultará en una mejoría significativa del pronóstico de estos pacientes, así como de su calidad de vida".
Un fármaco de menos de 2 euros demuestra ser útil en pacientes críticos con COVID-19